Quien no se arriesga no cruza el mar
Refrán: Quien no se arriesga, no cruza el mar.
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El refrán «Quien no se arriesga, no cruza el mar» significa que es necesario arriesgarse para conseguir algo que se desea, en particular algo difícil de alcanzar.
El mar es un símbolo de lo desconocido, lo peligroso y lo difícil. Cruzar el mar representa la búsqueda de algo nuevo, la superación de obstáculos y la consecución de objetivos.
Este refrán se utiliza para animar a las personas a tomar riesgos, a salir de su zona de confort y a perseguir sus sueños. Es un recordatorio de que, a veces, es necesario arriesgarse para conseguir lo que se quiere.
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