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El refrán «Quien mucho corre pronto para» es un dicho español que se utiliza para expresar la idea de que la precipitación puede llevar al fracaso.

El refrán se basa en la idea de que la prisa puede llevar a errores, y que los errores pueden tener consecuencias negativas. Por lo tanto, cuando una persona dice «Quien mucho corre pronto para», está expresando que la precipitación puede ser contraproducente.

El refrán «Quien mucho corre pronto para» se puede utilizar en cualquier contexto, pero es más común en situaciones informales. Por ejemplo, se puede decir de una persona que está tratando de hacer algo demasiado rápido, o de un grupo que está tomando una decisión sin pensar en las consecuencias.

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