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El refrán “No es oro todo lo que reluce” es una expresión popular que se utiliza para referirse a la idea de que no se debe juzgar a alguien por su apariencia, ya que esta puede ser engañosa. A menudo, las personas pueden parecer una cosa en el exterior, pero en realidad ser muy diferentes en su interior. Por lo tanto, es importante no dejarse llevar por las apariencias y conocer a las personas antes de juzgarlas.

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Refranes similares

• Todo lo que brilla no es oro.